Planificación Central del ......¡Clima!

Autor: jose manuel henriquez

La jactanciosa pretensión de planificar centralmente el sistema de transporte público de Santiago(Chile) ha resultado en un desastre económico para los santiaguinos y para todo el país, con pérdidas millonarias que debemos pagar entre todos (800 millones de US$ para este año), y con un elefante blanco que no sabemos donde poner y que come mucho, muchísimo más de lo que produce.

Pero esta historia no es nueva: es el resultado invariable de la ideología socialista en cualquier ámbito; la planificación centralizada del desarrollo (de lo que sea), y sin importar que en su ejecución se "invite" a participar a agentes privados, como en el Transantiago, no tiene otro fin ni otro destino que el que se ve en este caso digno de estudio.

Casi en todo el mundo se ha aplicado en algún momento alguna receta de planificación central de la economía y siempre con un desastroso fracaso como resultado, pero la lección no se aprende. Siempre es más fuerte la soberbia y la megalomanía del iluminado de turno que cree tener un derecho divino de imponer a los demás su receta mágica para solucionar (o "salvar") esto o aquello, sin preocuparse ni lo mínimo de las opiniones o deseos o conveniencias de sus "beneficiados" súbditos. Porque en la lógica del arrogante nadie mejor que él sabe lo que nos conviene a todos, y ante ese "bien común", es obvio que nuestra libertad individual carece de importancia o la tiene muy poca.

Hoy por hoy se pretende aplicar la misma archifracasada ideología a la "empresa" más costosa y absurda que la estulticia humana haya concebido jamás: la "planificación central" ¡del CLIMA!, y esto mediante la coacción dirigida desde una organización corrupta e ineficiente de gobiernos (la mayoría dictaduras), incapaces de solucionar -cada uno-, sus propios problemas domésticos, lo cual debería ser su única función (dicho sea de paso).

Con toda responsabilidad quisiera decir que esta es lógica de imbéciles.

Si lo menos malo que ocurre cuando se revienta una economía de burbuja es que se sinceran los precios y la sensatez vuelve a los mercados, como la resaca sigue a una borrachera, debemos reconocer que la "oportunidad" oculta tras la actual crisis es justamente la caída del precio del crudo (que importamos y que incide en nuestra inflación). El aprovechamiento a fondo de la coyuntura de precios bajos del crudo, es entonces fundamental para que esta economía sin petróleo pueda sortear la recesión.

Desgraciadamente Ricardo Lagos no coincide conmigo, y desde su podio de "estadista" supranacional ya pretende imponernos otra imbecilidad:

Impedir el ajuste a la baja del precio internacional del crudo, so pretexto de "paliar el calentamiento"; esto es como afirmar que los especuladores que llevaron el crudo a los absurdos 140 dólares por barril, estaban haciendo un gran servicio al clima. Ahora, que la burbuja se reventó, habrá que suplir la especulación con impuestos. Encarecer grotescamente (criminalmente, diría yo) los precios de la energía para hacer competitivas a las tecnologías ineficientes, lo que es equivalente a empobrecer a la Sociedad toda en beneficio de algunos desarrolladores (empresas transnacionales cazasubsidios), sólo nos demuestra una vez más la fatal arrogancia y aquella monstruosa egolatría de la que tanto hace gala Ricardo Lagos.

Indudablemente se siente un Ser Superior, perfectamente habilitado para decidir, desde su olimpo en la O.N.U. cuál será el precio mínimo al que deberemos comprar el crudo. Y este precio será un 260 % (¡doscientos sesenta por ciento!) sobre el valor actual de mercado.

Dios nos libre.

A continuación un extracto de la noticia publicada en "el País"

http://www.cambio-climatico.com/la-onu-pide-gravar-el-crudo-para-paliar-el-calentamiento#comment-18866

La ONU pide gravar el crudo para paliar el calentamiento

El enviado especial de la ONU para el cambio climático y ex presidente de Chile, Ricardo Lagos, lanzó ayer en Poznan (Polonia) la iniciativa para luchar contra el calentamiento que ya ha presentado en el Banco Mundial: “Un impuesto flexible para que el barril de petróleo se quede en unos 80 dólares (63 euros) haría rentables las energías renovables y por tanto mejoraría la lucha contra el cambio climático”, declaró en la Cumbre del Clima. En esta cita, 187 países buscan un acuerdo que en 2012 sustituya al de Kioto.

“Si a 10 economistas les preguntas qué medida prefieren para luchar contra el cambio climático, nueve dirían que poner un impuesto sobre el carbono”, explicó el enviado del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon. El problema es que el boom de las energías renovables se ve amenazado por el bajo precio del petróleo. A 118 euros era muy sencillo conseguir financiación para renovables. A 31, como está ahora, y bajando, mucho menos.

El ex economista jefe del Banco Mundial Nicholas Stern ha propuesto medidas similares. “No es bueno que el petróleo baje demasiado, es el momento para ponerle impuestos”, declaró en octubre. Y eso que entonces aún no había llegado al precio actual.

Nobuo Tanaka, director ejecutivo de la Agencia Internacional de la Energía, valoró la propuesta de Lagos: “Es algo parecido a lo que decimos. Si ponemos un precio al CO2 coherente con la reducción de emisiones que necesitamos para estabilizar la concentración de gases, el barril de petróleo llegaría a unos 180 dólares (140 euros)”.

Tanaka pidió que la crisis económica no pare la lucha contra el calentamiento -discurso repetido por todo el mundo en Poznan- y pidió un “new deal de energía verde”: “Necesitamos una revolución en el sistema energético. Necesitamos 20 plantas nucleares al año, 18.000 nuevas turbinas de viento y 30 plantas de captura de carbón al año. Tenemos que enviar el dinero a una energía baja en carbono. ¿Están los Gobiernos preparados para eso?”.

De Poznan, Lagos resalta que ya nadie duda del calentamiento. “En 2007 hay dos cosas que quedaron claras: que hay cambio climático, que es grave y que hay que actuar. Y que se tiene que negociar en Naciones Unidas, que no es un problema que pueda arreglar EE UU por su cuenta con China y la UE”.

Sobre la negociación del tratado que debe sustituir a Kioto, y que debe estar cerrado en Copenhague en 2009, el enviado especial de la ONU resaltó la importancia de que haya un acuerdo: “Sin él podemos caer en el trauma de Doha”. La eterna ronda de negociaciones para liberalizar el comercio y que sigue empantanada atormenta a los negociadores en Poznan. Nadie quiere repetirlo. Pero acordar en menos de un año un reparto de emisiones en el mundo con una Administración en EE UU recién llegada parece complicado.

Fuente: El País