09 julio, 2011

Cambio Climático Catastrófico por Calentamiento del Pacífico (CCCCP).

(CCCCP así se llamaba el paraíso de los trabajadores, en cirílico)

















Me informo de que la corriente fría de Humboldt , que corre pegada a la costa occidental de sudamérica desde latitudes antárticas hasta el ecuador, ha sufrido un ligero desplazamiento hacia el oeste frente al Perú. Debido a esto, la contracorriente cálida de El Niño se ha extendido más hacia el sur que lo habitual, elevando la temperatura ¡5º C o 6º C por encima de lo normal!. Este calentamiento ha provocado la extinción del plancton y de gran cantidad de peces locales.

Los peces de mayor tamaño que se alimentaban de éstos sucumbieron poco después, y han sido lanzados a la costa en grandes cantidades por el oleaje, originando un dantesco espectáculo.

Además, grandes cantidades de aves piscívoras mueren a consecuencia de la inanición. Muchas de esta aves vivían en las islas costeras y eran productoras de guano, de gran valor como fertilizante y cuya extracción es una industria preeminente en la zona.

La rica pesquería costera colapsó y la producción guanera quedó también interrumpida, y a lo largo de muchos kilómetros la costa ha quedado cubierta de los restos putrefactos de las aves muertas.

El calentamiento provocó también un ciclo de lluvias torrenciales desconocidas en la zona, que arrastraron toneladas de guano al mar, con lo que se realimenta el desastre. Tan intensas precipitaciones devastaron también los territorios próximos, ordinariamente áridos, causando grandes daños en la flora y la fauna naturales, cosechas, carreteras y edificios.

Las repercusiones ecológicas y económicas del citado cambio-climático-oceánico se extienden entonces, hacia la costa y el interior.

Si parece extraño que la O.N.U. no haya convocado a una asamblea urgente, o que Al Gore no haya emitido alguna declaración tremebunda, o que ni Pachauri haya dicho nada sobre esto, es que la noticia data de la primavera de 1925. Fué consignada en un trabajo de Murphy , (Murphy, R.C. 1926 Oceanic and climatic phenomena along the west coast of South America during 1925, Geograph. Rev. 16: 26-54), y aparece citada en la ecología de Clarke (Clarke, Elementos de Ecología, 1974).

Sucede que la mentada corriente de Humboldt, llamada también “Corriente del Perú”, siendo que la mayor parte de su recorrido lo hace por el Mar de Chile, (un resabio del virreinato, supongamos), de vez en cuando tiene la mala ocurrencia de desplazarse hacia el oeste, dando lugar a la intrusión de El Niño hacia el sur. Recuerdo haber escuchado comentarios sobre el fenómeno en la niñez (la mía), allá por los sesentas, cuando un “corrimiento” análogo provocó el colapso de la pesquería de la anchoveta, entonces una industria muy importante en el Norte de Chile.

Si esto ocurriera hoy, y hay que tener en cuenta que los fenómenos anómalos que alguna vez ocurrieron con toda seguridad se repetirán alguna otra vez, podemos imaginarnos la histeria que se desataría, y si ocurriera ya hoy mismo, sería la tabla de salvación del fraude del calentamientoglobal-cambioclimático y del negocio de nuestro viejo y querido Al (“El Magnífico”, para sus amigos).

Nos advertirían entonces de la urgencia de tomar “medidas”, y no hay duda de que la O.N.U. sacaría buen provecho de la ocasión, convocando a alguna “cumbre” en algún exótico paraje.

Por eso es que estoy dando a conocer el asunto; esto ya ocurrió, y fué cuando la industrialización o la emisión de CO2 no eran nada perceptibles en esta parte del mund...planeta (digo), y quizá tampoco en ninguna otra.

Llama la atención que para hoy se tiene que una anomalía “El Niño” superior a 1,5º C ya se considera “intensa”, y su influencia se hace notar hasta la zona central-sur de Chile, con temporadas extraordinariamente lluviosas.

Aquí se consigna una anomalía de 5º C a 6º C, que ocurrió en 1925, y es fácil suponer la avalancha de titulares, reportajes y paranoia colectiva que se desatará cuando algo así se repita. Los tontitos de las ONGs encadenándose en alguna chimenea, Antonio tronando en su púlpito, algún estadista repartiendo gratuitamente las nuevas ampolletas “ecológicas” de mercurio, y Bankimún en todas las portadas con cara de circunstancias (nada difícil en un hombre de su intelecto…..), conminando perentoriamente al mund...planeta (digo), a apresurar de una buena vez los “acuerdos vinculantes”, necesarios a fin de congelar el crecimiento, implantar de una vez por todas los impuestos mundiales, subsidiar a las trasnacionales que abnegadamente se abocan al desarrollo de molinillos de viento y colectores solares, racionar los vuelos de avión,, etc. etc.

En fin, repito, que esto ya ocurrió y no hay duda de que volverá a ocurrir. Para entonces, conmino a los ciudadanos del mund...(del planeta, digo, perdón), a que estén advertidos, y que redoblen vigilancia, prudencia y cautela.

No vaya a ser cosa de que les quieran extraer más plata (o “pasta”, como dicen en la península), aunque sólo fuera para reducir en algo la “huella de carbono”,... .les dirán.